DESNUDAS

Las sesiones de desnudos nacieron muchos años después de mi práctica diaria de autorretratarme. El ejercicio de la automirada y la reflexión sobre mi propio cuerpo me llevaron a un autoconocimiento profundo que intento expandir a las demás, retratándolas como parte de un proceso de observación de si mismas.

¿Por qué desnudas? Porque en un mundo tan objetivizador de nuestros cuerpos reivindico el derecho a salir a la luz desde una mirada amorosa y compasiva. Reivindico el derecho a mirarnos y ser vistas, sin juicios, sin razones, sin un porqué; más bien con un para qué.
Propongo un espacio lúdico y creativo donde podamos explorar el goce de sentir nuestra piel, de explorar nuestra sensualidad sin culpas, aceptando nuestra diversidad corporal, habitando nuestras sombras y reflejando nuestros contrastes. Poner luz donde hay oscuridad, mirarnos con respeto, con verdad y sobre todo con libertad.